Con lo anterior queremos ejemplificar que aunque NO es imposible cambiar nuestra forma de pensar muchas de las consecuencias de situaciones imprevistas que pudieren ocurrir a lo largo de este año serán resultado de nuestra actitud hacia la vida.
 
Todos sin excepción de alguna manera llegaremos a experimentar TEMOR a algo en distintas ocasiones a lo largo de nuestras vidas, veamos el siguiente versículo:
 
Génesis 3:10 Nueva Traducción Viviente (NTV)
10 El hombre contestó: —Te oí caminando por el huerto, así que me escondí. Tuve miedo porque estaba desnudo.
 
La biblia nos narra que el primer hombre también experimentó el miedo, en su particular caso como consecuencia a desobedecer las instrucciones de Dios de cómo vivir y el resultado fue perder la comunión con Dios y no vivir más en el “Edén” (Génesis 3:1-24). El miedo produce inseguridad a manera de ejemplo usted habrá observado que los niños muchas veces se muestran inseguros en:

Lo anterior dependiendo de la crianza puede resultar en problemas profundos a lo largo de la vida pero en una temprana edad los padres pueden ayudarlos a superar muchos de los miedos e inseguridades al orientarlos en la dirección correcta y ofrecer protección. Veamos el siguiente versículo:
 
Génesis 15:1 Dios Habla Hoy (DHH)
15:1 Después de esto, el Señor le habló a Abram en una visión y le dijo: —No tengas miedo, Abram, porque yo soy tu protector. Tu recompensa va a ser muy grande
 
En un tiempo distinto en la biblia nos encontramos el anterior versículo donde Abram recibió las siguientes palabras de parte de Dios: “No tengas miedo, porque yo soy tu protector”. Lo invitamos a reflexionar acerca de cómo en nuestra actualidad el jurar por nosotros una acción o compromiso ha terminando disolviendo familias, en un juzgado solo importan los contratos firmados. Y así terminamos entendiendo que prestar cualquier cosa solo de palabra es un gran riesgo dependiendo de la persona que en ocasiones se te termina escondiendo para no pagar, de allí que una promesa de parte de Dios es de un gran valor.
 
Sin importar la situación complicada que puedas llegar a experimentar las promesas de Dios permanecen y podemos estar seguros que:

Si usted como creyente entiende qué promesas Dios le ha dado, sus temores con respecto a estas se desvanecerán. Es importante en este punto que usted se esté formando adecuadamente a través del estudio de la biblia ya que también en estos tiempos son muchos los charlatanes (Mateo 7:15-16, Jeremías 23:17, Deuteronomio 18:21-22) que dicen hablar de parte de Dios diciéndole a usted lo que quiere escuchar (no hay palabras de arrepentimiento, no se predica a Cristo, todo es teatro) a cambio de dinero.
 
Usted puede avanzar a lo largo de este año siendo realista, la relación que lleva con Dios está ligada a su protección. Así como un padre protege a su hijo cuando se encuentra desvalido PERO cerca. Veamos el siguiente versículo:
 
Juan 6:37 Nueva Traducción Viviente (NTV)
37 Sin embargo, los que el Padre me ha dado vendrán a mí, y jamás los rechazaré.
 
Este año sin importar cómo le vaya su meta debe ser saberse aprobado por Dios en la toma de decisiones, quizá le vaya bien o mal pero Dios no puede faltar. No olvide que los resultados de la vida de fe se miden a largo plazo y lo que hoy parece bueno tal vez no lo sea después y viceversa. Le dejamos los siguientes versículos como cierre:
 
Proverbios 9:10-12 Dios Habla Hoy (DHH)
10 La sabiduría comienza por honrar al Señor; conocer al Santísimo es tener inteligencia. 11 Gracias a la sabiduría, vivirás mucho tiempo y aumentarán los años de tu vida. 12 Si eres sabio, tuyo será el provecho; si eres insolente, tuya será la responsabilidad.