El tema del día de hoy es el mal empleo del tiempo en la familia de un creyente. Esta semana reflexionamos acerca de lo pronto que percibimos pasar el tiempo en la adultez, mientras que los niños experimentan pasar el tiempo lentamente y se preguntan qué será de ellos en el futuro. Los que ya nos encontramos en ese futuro de manera continua nos olvidamos de hacer pausas y observar qué está pasando con nosotros.
 
Los días se van tan pronto como se nos fuga de entre las manos el agua al sujetarla. Hoy es un buen día para vivir en plenitud pues mañana no sabemos si aquí estaremos, la salvación que recibimos de Cristo también debería ser predicada ahora porque quizá mañana no haya mas a quien compartir, así es nuestro paso por la vida y a las personas que podríamos compartir el evangelio en este instante para su salvación no tenemos garantía de volverlas a ver incluso hoy.
 
1 - ¿A quién le hablaría de Cristo en primer lugar?
A mi esposa, hijos y familiares que seguramente también usted los tiene por lo más importante. Reunirse en la misma iglesia no significa que realmente todos creen en Cristo, por experiencia sabemos que mientras algunos ya tenemos nuestra convicción clara acerca del reino de Dios por otro lado nuestros familiares suelen acompañarnos por convivir, sobre todo en los jóvenes esto se ve reflejado en no estar desde un principio por voluntad propia, allí tienen amistades y amigos pero el principal interés suele estar en actividades lúdicas. 

   
Muchas familias delegan la enseñanza del evangelio a la iglesia pero esto debería ocurrir en la vida práctica fuera de ella, no se debe malentender las palabras anteriores pero por siglos se ha hablado de algo que no debe ocurrir en los templos y sin embargo pasa, que la gente acude guardando apariencias y de esto es de lo que se necesita hablar con la familia. Su fe no depende de que tu padre o tu madre se congreguen y menos de sus amistades,  su búsqueda de Dios es algo personal y los demás solo pueden hablarle de sus propias experiencias que deberá juzgar con el tiempo. Veamos el siguiente versículo:
 
1 Corintios 1:18 Dios Habla Hoy (DHH)
18 El mensaje de la muerte de Cristo en la cruz parece una tontería a los que van a la perdición; pero este mensaje es poder de Dios para los que vamos a la salvación.
 
A la familia más cercana por lo usual no podemos enseñarle con teología pero sí con lo que ven en nosotros, padres golpeadores, viciosos e infieles reciben una casi nula credibilidad por parte de la familia, no pueden observar de qué Dios les hablan porque en la práctica no reflejan la imagen de en quien dicen creer. De allí el resultado que conocemos de tantos hijos de pastores y líderes descarriados debido a que en buena medida en lo personal no reflejan lo que hablan en el púlpito pero lo mismo ocurre en muchas familias que se dicen creyentes.
 
2 - ¿A quién le hablaría de Cristo en segundo lugar?
Nuevamente necesito responder a mi esposa, hijos y familiares, la obra de Cristo no se concluye con que los sermonie un día que me encuentre “inspirado”, el evangelio encontrará lugar en otras personas fuera de mi círculo familiar cuando cada uno de nosotros realmente seamos transformados. Veamos el siguiente versículo:
 
Mateo 5:14 Dios Habla Hoy (DHH)
14 »Ustedes son la luz de este mundo. Una ciudad en lo alto de un cerro no puede esconderse.
 
¿Puede comprender las palabras anteriores en relación a nuestro tema? Mientras que usted se preocupa por evangelizar a desconocidos el “mundo” se encarga de llevar la perdición a los miembros de su familia. Piense en su pareja, sus hijos y familiares que se congregan desde hace algún tiempo pero simplemente no tienen interés en crecer, ¿también de esto vamos a culpar a la iglesia por no motivarlos? ¿Acaso no hemos tenido un encuentro con Cristo a nivel personal? Porque esto explicaría que usted tiene mucho trabajo aún por hacer y el tiempo se le está acabando.
 
Salmos 90:12 Dios Habla Hoy (DHH)
12 Enséñanos a contar bien nuestros días, para que nuestra mente alcance sabiduría.