El tema del día de hoy es acerca de cómo afrontar la sensación de estancamiento que en alguna ocasión podría llegar a nuestra vida después de intentarlo todo. Seguramente ha tenido problemas y ha encontrado la forma de resolverlos pero ¿qué pasa cuando los problemas simplemente no se resuelven? Es decir hay situaciones que aunque pasa el tiempo no vemos una posible solución y esto nos termina impactando emocionalmente. De esto hay ejemplos:

• Las enfermedades.
• Las demandas.
• Los conflictos familiares.
• Las herencias.

Al igual que otras personas, los creyentes hemos de enfrentar situaciones cuyos orígenes parecen imposibles de comprender. Usted se ha esforzado por hacer bien las cosas pero esto no significa que nunca se enfermará o que las personas que le acompañan valoren o tengan los mismos principios de vida que usted. La realidad es que nos podemos llegar a desesperar por no comprender cuál es el propósito por el cual Dios permite que nos ocurran algunas vivencias. ¿Entiende de lo que estamos hablando?
 
Nuestra fe si ha sido templada con experiencias y acompañada de la palabra de Dios seguramente nos permitirá entender mejor cómo afrontar las situaciones menos esperadas. Veamos a continuación los siguientes versículos.
 
Salmos 40:1-3 Palabra de Dios para Todos (PDT)
1 Yo confié sinceramente en el SEÑOR, y él escuchó mi oración. 2 El SEÑOR me sacó del pozo de la destrucción; me sacó del barro y del lodo. Me puso los pies en la roca, en tierra firme, donde puedo andar con seguridad. 3 Él puso una canción nueva en mi boca, una canción de alabanza a Dios. Mucha gente verá lo que Dios ha hecho y lo alabará; se llenarán de confianza en él.
 
Vemos que comienzan los versículos anteriores diciendo “yo confie sinceramente”, la confianza seguramente habrá escuchado que es algo difícil de ganar y fácil de perder lo cual resulta cierto, casi a cada persona que usted le pregunte si ha sido decepcionada le contestará de manera afirmativa de una o varias veces que esperaba una acción por parte de alguien cercano pero al final no le fue recíproco. Entregamos mucho de nosotros en personas que llegan a ser mal agradecidas, pero estas palabras no se deben malentender pues el propósito de ayudar a alguien nunca debe ser recibir algo a cambio, sin embargo en ocasiones nos regresan un mal.
 
Los mismos versículos describen algo que a muchos nos puede representar a nivel emocional, “El SEÑOR me sacó del pozo de la destrucción”, las experiencias y la palabra de Dios nos deberían permitir distinguir su ayuda cuando esta llegue y luego dice “me sacó del barro y del lodo”, todo creyente sabe en qué manera son ciertas estas palabras en nuestras vidas.
 
¿Siente que se encuentra en un pozo profundo? De allí lo quiere sacar Dios y espera que le pida ayuda, Él sabe de nuestras necesidades, el siguiente versículo nos lo afirma:
 
Lucas 19:10 Palabra de Dios para Todos (PDT)
10 Porque el Hijo del hombre vino a buscar a los perdidos y a salvarlos.
 
La ayuda llegará cuando sea el momento adecuado “Me puso los pies en la roca, en tierra firme, donde puedo andar con seguridad” esto será así en nuestras vidas si confiamos sinceramente y oramos a Él, ¿Cuándo fue la última vez que dobló su rodilla para pedirle su apoyo? ¿Cómo saber si ya nos está ayudando?, solo usted sabe cuándo acude al Señor en oración, están quienes dicen que todo el tiempo lo tienen presente pero los vemos vivir sin aparente interés en su opinión; por otro lado, sabemos que quienes acuden a Él continuamente de sus labios salen alabanzas y no quejas.
 
Cuando usted sienta que la vida no ofrece nada nuevo y que sus problemas lo tienen atrapado es entonces el momento de recordar que la alabanza (cantar al Señor) le puede dar esa fuerza extra que necesita para continuar, no tenga pena puede hacerlo en privado o aprender una melodía y repetirla con la boca cerrada durante el día, todos necesitamos un punto de apoyo “Me puso los pies en la roca, en tierra firme, donde puedo andar con seguridad” y tenga la confianza que más de una persona notará que usted se encuentra saliendo adelante y darán gloria a Dios, “Mucha gente verá lo que Dios ha hecho y lo alabará; se llenarán de confianza en él.” Si usted como creyente realmente ha sido sacado del pozo entonces puede confiar que Dios está esperando su alabanza.
 
Jeremías 17:14 Dios Habla Hoy (DHH)
Sáname tú, Señor, y seré sanado; sálvame tú, y seré salvado, pues sólo a ti te alabo.